Hola! Soy María José Herrera, mamá, diseñadora, asesora de imagen y fundadora de La Gracia Studio.

Cuando comencé mi camino en diseño de vestuario, la idea era crear prendas hechas por mí, totalmente originales, pero mi camino fue por otro lado, llevándome a trabajar haciendo colecciones para mujer en diferentes marcas de retail donde, entre otras cosas, aprendí a proponer una colección, trabajar en equipo, ver el aspecto comercial de cada detalle, conocer a los proveedores y viajar para inspirarme.

A pesar de estar feliz con mi trabajo, no me sentía realizada, no veía el aporte social de lo que hacía, sin embargo, como a muchas nos pasa, uno sigue haciendo lo que ya sabe hacer, engranando la máquina comercial y aceitando las cosas de vez en cuando.

Entonces, como yo no me detuve, la vida me obligó a hacerlo, me fui a vivir un año fuera de Chile, con mi marido y mi primera hija. Cuando volví, ya con un año de reflexión, decidí hacer un diplomado de asesoría de imagen. Las clientas fueron apareciendo poco a poco y tuve la fortuna inmensa que me dieran su confianza y la oportunidad de sumergirme en sus closets y en sus historias. Luego de muchas asesorías, entendí que esos closets eran relatos de vida de diferentes mujeres y que representaban la identidad de cada una.   Las prendas no sólo eran una moda, sino que las envestían de identidad. Por otra parte, veía como se acumulaban prendas que jamás serían usadas, porque no representaban a sus dueñas, sino a la moda que gobierna la consciencia de muchas mujeres. Con ello, se alimentaba un sistema que engrosa la lista de contaminantes del medioambiente, afectando nuestro entorno y nuestras vidas.

Es así como hoy ayudo a mujeres a encontrar un estilo propio, en el que surja un relato por medio de la imagen personal de cada una, transmitiendo la confianza y comodidad que da saber qué es, lo que te favorece y con qué te sientes tú misma.

Soy experta en definir el estilo individual y en encontrar la belleza de cada proyecto que realizo, visualizando el contexto y valorando el tiempo con que cuentan mis clientas en su día a día. Para mí, la imagen personal es un elemento de comunicación muy poderoso, este proyecta la identidad y el carácter de quién se viste. Las prendas no deben elegirse al azar, pues son una manifestación de nuestro interior y de lo que queremos que los demás conozcan de nosotras.

Me siento feliz cuando mis clientas se ven al espejo y reconocen en esa imagen a la mujer que es y cuando miran su closet, cada elemento que está ahí les encanta e identifica, sintiéndose cómodas y muy ellas.

Esa es la gracia!